HIMNO
NACIONAL DEL ECUADOR
Letra: Juan León Mera.
Música: Antonio Neumane.
CORO
¡Salve Oh Patria, mil veces!
¡Oh Patria!
¡Gloria a ti! Y a tu pecho
rebosa
gozo y paz, y tu frente radiosa
más que el sol contemplamos
lucir. |
Primera
estrofa.
Indignados tus hijos del yugo
que te impuso la ibérica
audacia,
de la injusta y horrenda desgracia
que pesaba fatal sobre ti,
santa voz a los cielos alzaron,
voz de noble y sin par juramento,
de vengarte del monstruo sangriento,
de romper ese yugo servil.
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Segunda
estrofa.
Los primeros los hijos del suelo
que, soberbio; el Pichincha decora
te aclamaron por siempre señora
y vertieron su sangre por ti.
Dios miro y acepto el holocausto,
y esa sangre fue germen fecundo
de otros héroes que, atónito,
el mundo
vio en tu torno a millares surgir. |
Tercera
estrofa.
De estos héroes al brazo
de hierro
nada tuvo invencible la tierra,
y del valle a la altísima
sierra
se escuchaba el fragor de la lid;
tras la lid la victoria volaba,
libertad tras el triunfo venía,
y al león destrozado se oía,
de impotencia y despecho rugir. |
Cuarta
estrofa.
Cedió al fin la fiereza española,
y hoy, Oh Patria, tu libre existencia
es la noble y magnifica herencia
que nos dio, el heroísmo
feliz;
de las manos paternas la hubimos,
nadie intente arrancárnosla
ahora,
ni nuestra ira excitar vengadora
quiera,
necio o audaz, contra si. |
Quinta
estrofa.
Nadie, Oh Patria, lo intente.
Las sombras de tus héroes
gloriosos nos miran,
y el valor y el orgullo que inspiran
son augurios de triunfos por ti.
Venga el hierro y el plomo fulmíneo,
que a la idea de guerra, y venganza
se despierta la heroica pujanza
que hizo al fiero español
sucumbir. |
Sexta
estrofa.
Y si nuevas cadenas prepara
la injusticia de bárbara
suerte,
¡gran Pichincha! prevén
tu la muerte
de la Patria y sus hijos al fin;
hunde al punto en tus hondas entrañas
cuando existe en tu tierra el tirano
huele solo cenizas y en vano
busque rastro de ser junto a ti. |
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